La dura crisis por la que está pasando la economía estadounidense y la que, por supuesto, afecta a los demás países del mundo, trajo como consecuencia que las entidades bancarias como El Banco Central Europeo (BCE), La Reserva Federal de EE.UU. y otros bancos centrales de los continentes de Europa y América del Norte acordaran una reducción en las tasas de interés, esto con el propósito de reducir las tensiones que está padeciendo el sector financiero. De esta manera, los representantes de tales entidades esperan afrontar el problema de la inflación, la cual obstaculiza la estabilidad de los precios y la capacidad para obtener créditos tanto la empresa como los hogares.
Un ejemplo de la medida adoptada por los bancos nos la confirma la "EUROZONA" en donde se bajará el interés así: del 4.25% al 3.75% a partir del 15 de octubre de 2008
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